¿ QUÉ ES EL AMOR VERDADERO, EXISTE ?
El amor posible y real está íntimamente emparentado con lo que en el lenguaje cotidiano podríamos enunciar como “querer mucho a alguien”, y que simplificado se puede definir como la sencilla y comprometida manifestación del “más puro interés que alguien es capaz de sentir por otra persona”.
Y que quede claro que digo “sencilla” no para restarle importancia, sino para restarle solemnidad y para que todos podamos entender la magia y presencia de este sentimiento en la vida de todos.
Dicho de otra manera: la persona que se ocupa de ti y siente que le importas, la que se alegra con tus logros y te acompaña en un momento difícil, la que respeta tus tiempos y tus elecciones… sin lugar a dudas te quiere, aunque a veces te diga que no, aunque nunca piense seriamente en suicidarse si te va mal en lo que tú más deseas, y aunque algún día no te elija para compartir alguno de sus proyectos.
Nadie duda de la verdad que hay en el amor de una madre por su hijo. Pero, ¿y en el amor de pareja? ¿Es cierto eso de que el amor solo dura dos años? ¿Confundimos amor romántico con amor verdadero? ¿Amamos por necesidad o hay un amor pleno y generoso que lo entrega todo sin obtener nada a cambio? ¿Queda algo cuando apartamos el sexo?
Manuel Vicent (Castellón, España, 1936) escribe en su novela Cuerpos Sucesivos describe el amor verdadero
El amor no tiene nada que ver con la reproducción. Es una conjunción espiritual, que se alimenta de imaginación, sueños, viajes, huidas, aventuras, renovaciones, fantasías, palabras, palabras, palabras. El alma solo es un hálito. La muerte del amor es la costumbre, el tedio, la hermandad de las carnes, la falta de imaginación. También hay que bajar con el amor al pozo del sexo, pero el sexo solo es un calambre si no se le dota de misterio, de oscuridad, de la pulsión de la muerte.
La respuesta
Todos estos cambios de criterio que la modernidad nos ha traído han derivado en una alteración del concepto de amor. Hoy —debido a que por norma general se ha elegido basándose en criterios equivocados— se tiende a confundir el amor con el enamoramiento de los primeros años. Por ello a la pregunta de si existe el amor verdadero debemos responder que sí. Sí, pero siempre que para juzgar utilicemos criterios reales y no los que la modernidad nos han impuesto. Si al sentimiento que llamamos amor se le somete a una prueba de stress para determinar su autenticidad y se le exige ser una sensación que nos mantenga en estado de plena excitación física y mental durante más de 30 años; si esa emoción debe llevarnos a pensar de forma continua que la vida es maravillosa y que la persona amada es la mejor que hay sobre la tierra, entonces deberemos responder que no, que ese amor no existe. Pero si por amor entendemos el sentimiento de cariño y cercanía que lejos de ser un fin en sí mismo nos ayuda a sacar lo mejor que hay dentro de nosotros mismos para hacer feliz a la otra persona y de ese modo dar sentido a nuestra vida, si esos son los parámetros para juzgar y además estamos con la persona correcta —no nos olvidemos de ese dato— entonces la respuesta es sí, el amor verdadero existe.